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La diabetes es considerada la enfermedad del siglo XXI. Este padecimiento puede producir complicaciones en muchas partes del cuerpo, precisamente el pie diabético es una de las afecciones más frecuentes y que afecta a un gran número de personas. Por ello, resulta importante conocer sobre el pie diabético y los cuidados que deben tenerse para poder abordarlo de una forma integral que contribuya con la mejora de la calidad de vida de quienes lo padecen.

El pie diabético es un síndrome que engloba las alteraciones anatómicas y/o funcionales que ocurren en los pies de las personas con diabetes como consecuencia de su enfermedad metabólica, es de origen multifactorial y es considerada como una de las complicaciones crónicas de mayor morbilidad en las personas con diabetes. Este padecimiento es inducido por la hiperglicemia mantenida y en la que se produce ulceración del pie con o sin la existencia de isquemia (falta de oxígeno en los tejidos). 

Causas que originan el pie diabético 

El pie diabético aparece por la falta de sensibilidad, por el desconocimiento sobre factores de riesgo como: la neuropatía diabética, las artropatías, la dieta, el hábito de fumar, el alcoholismo, los niveles elevados de la glicemia, además por recibir golpes en los pies, por andar descalzo, cortarse mal las uñas, pincharse con un clavo, o no cuidarse adecuadamente los pies. 

Cómo realizar el autocuidado de los pies:

• Higiene: lavarlos todos los días con agua a temperatura ambiente usando una esponja y jabón neutro, lavar bien entre los dedos y debajo de ellos, mantenerlos secos sobre todo el área entre los dedos con una toalla suave sin friccionar y cortarse las uñas en forma cuadrado.  
• Hidratación:  la piel seca es frecuente en las personas con diabetes por lo que debe usar crema hidratante en los pies sobre todo en los talones efectuando un ligero masaje sin fricciones, no aplicar crema entre los dedos, ya que favorecería la infección de hongos y fisuras. 
• Calzado: desechar el zapato demasiado gastado o estropeado, siempre usar calcetines o medias de algodón, revisar diariamente el interior del calzado para ver su integralidad, zapatos flexibles y al número adecuado a su talla de pie, no caminar nunca descalzo ni en la casa ni en la playa

Recomendaciones para comprar un nuevo calzado

Comprarlo por las tardes porque es cuando los pies están más dilatados, no deben ser demasiados estrechos ni holgados, no cómpralos con la esperanza que van a estirar más con el uso, hacer uso de los zapatos progresivamente, máximo de tacón 2 cm. calzado con suela amortiguadora antideslizante.

Debe consultar lo más pronto posible cuando presente lo siguiente: 

• Cortes o lesiones en la piel del pie 
• Uñas encarnadas 
• Cambio de coloración en la piel de los pies 
• Cambio en la sensación del dolor 
• Deformidades en los pies 

Es de vital importancia el autocuidado y conocimiento de los factores de riesgo que predisponen o pueden llegar a empeorar la condición del pie diabético. Por ello ser recomienda una dieta baja en azúcares, mantener una presión arterial dentro de los rangos normales, no consumir tabaco y mantenerse en actividad física, evitando el sedentarismo; así también, recurrir oportunamente al médico al ver una alteración en el pie afectado. 

Revisión bibliográfica

Conde, F. J. P., Galván, J. R., & López, J. M. C. (2006). Taller práctico sobre cuidados en el pie diabético: experiencia en la sierra sur de Sevilla. Salud del pie: revista andaluza de podología, (40), 30-33.

Martínez, A. A., & Rodríguez Téllez, O. L. (2019). Adherencia terapéutica y cuidados podológicos asociados al pie diabético en pacientes con diabetes tipo 2, Centros de Salud José Rubí-El Viejo, III trimestre 2018 (Doctoral dissertation).

Cornejo-Ramírez, D. (2014). Cuidados y prevención del pie diabético.