post

Hermanos todos.

Una vez más nos acercamos a la celebración de La Inmaculada Concepción de María, patrona de nuestra Parroquia Universitaria. Acogemos con júbilo y con esperanza cada uno de los días de esta novena y le pedimos a la “toda pura”, que siempre interceda por nosotros ante su hijo Jesús, nuestro Salvador.

En esta ocasión quiero compartir unas palabras en torno a la celebración litúrgica de la Inmaculada Concepción de María, siempre son de mucha ayuda para la formación, la animación de nuestra fe y, por supuesto, la celebración de la misma. Pondré, por tanto, la mirada en seis aspectos que, de repente, pasan desapercibidos ante nuestra vista, y sin embargo son los que caracterizan esta Solemnidad.

La solemnidad de la Inmaculada Concepción de María se celebra el 8 de diciembre, como se ha venido haciendo desde siglos. Además, se añadió el motivo de que el dogma fue definido en ese día.

Las oraciones de la Eucaristía evocan la preservación de María de todo pecado, en previsión de los méritos de Cristo, e imploran asimismo la limpieza de nuestros pecados.

El prefacio relaciona la inmaculada concepción con la maternidad divina y los inicios de la Iglesia. María, la Purísima, se presenta a la Iglesia como modelo de “gracia y santidad”.

Las lecturas bíblicas tomadas del Gn 3, 9-15.20; Ef 1, 3-6.11; Lc 1, 26-28, presentan a maría en el conjunto de la Historia de la Salvación. María es colocada como partícipe de ese plan redentor, recibiendo la elección para ser santa e irreprochable ante Dios, y al mismo tiempo disponible y obediente ante la voluntad divina.

Por su parte el salmo responsorial tomado del Sal 97, 1.2-3a.3c-4, es un cántico de alabanza a la acción de Dios, que se aplica a María en esta celebración: Cantad al señor un cántico nuevo, porque ha hecho maravillas.

Conviene, por último, recordar, que la reforma litúrgica sugiere que esta celebración se relacione con el tiempo de adviento donde, precisamente, se encuentra ubicada.

Felices fiestas patronales para todos.

Pbro. Pedro José García Castro.